29/05/2024 VIDA, MÁS ALLÁ DE TODO

En el marco del Día Nacional de la Donación de Órganos y Tejidos, desde el CUCAIBA consideramos que es fundamental resaltar la invaluable contribución de las y los donantes en el proceso de trasplante. En este sentido, es necesario abordar el tema de la muerte como parte ineludible del ciclo de la vida.

Es importante comenzar a dialogar abiertamente sobre este tema y reconocer su carácter natural para poder comprenderlo desde diversas perspectivas.

Informarse ayuda a entender este proceso, dejando en claro que ser donante da posibilidad a personas que lo necesitan. La muerte es un tema sensible para la sociedad, a menudo está asociada con dolor, pérdida y fracaso olvidando que esta es parte natural de la vida.

Hace un tiempo, Nerina Marogna, médica y trabajadora de la Salud, perdió a su papá, él en vida había decidido ser donante, algo que su familia respetó al momento de su muerte. Muy sensibilizada por la situación, Neri tuvo la necesidad de compartir una carta pensando en aquellas personas que atraviesan el proceso de trasplante; era algo hablado en su familia, situación que ayudó muchísimo en ese momento decisivo.

La carta tiene como finalidad concientizar que el trasplante es posible gracias a las y los donantes, entendiendo que la muerte es parte de la vida.

“Papá murió cuando tenía 68 años” dice uno de los párrafos y agrega que “en ese momento todavía no había llegado a ser abuelo, “no llegó a conocer a sus nietes”.

“Les escribo para contarles un poco mi historia y la de la persona que donó sus órganos, él era mi papá y la verdad que si bien ya paso un tiempo desde su muerte yo lo sigo extrañando y lloro mientras escribo estas palabras” comienza este relato escrito desde lo más profundo de su corazón.

“Sé que ustedes recibieron su hígado y uno de sus riñones, esos fueron los órganos que se pudieron trasplantar según me contaron sus médicos, y que en ese momento ustedes tenían 66 y 72 años, una edad bastante aproximada a la del viejo, justo”, en este tramo de su relato, deja en claro lo importante de naturalizar un momento tan doloroso como es la pérdida de un ser querido sin olvidar la voluntad de su padre; ser donante.

“Les voy a contar solo un poco de él, si bien podría estar horas recordando momentos compartidos, era una persona tan buena, en serio, no se dan una idea la bondad que tenía, me ayudaba siempre, estaba siempre acompañándome, ¿será por eso que lo extraño tanto?”.

En todo lo escrito se puede sentir el amor de ella a su padre y la capacidad de entender su decisión.

Algunos textuales como; “Sé que a partir del trasplante sus vidas cambiaron” o  “Papá los ayudó, fue lo último que hizo en esta tierra, ayudar a alguien”, reafirman que la donación es un acto generoso y desinteresado y lo más importante, una posibilidad de vida para la gente que espera un trasplante.

En la provincia de Buenos Aires, al día 28 de mayo, existen 4.923 personas en lista de espera, 2.803 esperan un trasplante de órganos y 2.120 precisan ser trasplantadas de córneas.

Queda en claro que hablar de la muerte es importante y abordar abiertamente el tema permite derribar mitos y concientizar a la población sobre la importancia de la donación de órganos y tejidos, desafiando los estigmas y las ideas erróneas que rodean la muerte. La donación de órganos es un acto de inmenso valor que puede transformar vidas.

 

Podés registrarse como donante de órganos hoy mismo aquí:
https://www.argentina.gob.ar/manifestar-la-voluntad-hacia-la-donacion-de-organos-y-tejidos